EL PINTOR DE SOMBREROS

Moda Exclusiva
Artesanía Valenciana

Me llamo Luisen y soy de formación autodidacta en el ámbito de la pintura. He dibujado y pintado desde niño.

 

Hace algunos años decidí investigar nuevos soportes para mis creaciones: piedras, textiles, maderas… hasta que se me ocurrió probar con sombreros. Pintar sombreros implica una serie de limitaciones y ventajas que me parecen muy interesantes. En primer lugar, no se puede utilizar cualquier tipo de pintura. Para que las obras perduren en el tiempo, deben realizarse con acrílicos que luego se protegen con un barniz especial. Además, los diversos materiales con los que están hechos los sombreros (rafia, esparto, paja, papiro…) también condicionan lo que puedes pintar en ellos. El hecho de que sean una prenda de vestir, un complemento, también influye para plasmar dibujos que sean coherentes y ponibles.

EROS RECIO Y LUISEN

Actualmente trabajo dos formatos de sombreros: los que llamamos de playa, que están hechos de fibras naturales y sirven para protegerse del sol. Son los tipo Panamá, Trilby, Capelina, Canotier…; y boinas de lana. Los tejidos y formas de cada sombrero o boina me inspiran para hacer varios tipos de pintura. En algunos casos, me decanto por lo más abstracto y en otros por reflejar la Naturaleza casi siempre de un modo muy Näif. El momento mágico es cuando desembalo el sombrero o la boina y me quedo un rato mirándolo. Es entonces cuando decido, cuando él me inspira los motivos y los colores que le darán un nuevo aspecto único y original.

 

Realizo encargos bajo pedido siempre que me permitan inspirarme libremente; es decir, no voy a plasmar una foto o un dibujo específico pero si quieres un sombrero o boina con algún motivo relacionado con, por ejemplo, mascotas, la Música, la Naturaleza, etc. puedo hacerlo para ti.

Mi tienda
Workshop

Tengo un establecimiento de cara al público. Es lo que hoy en día llaman un Workshop. Es mi taller, en donde creo y también es mi tienda física, en donde vendo las creaciones. El hecho de estar ubicado en Ruzafa, mi barrio de nacimiento, en donde hay una vidilla cultural, artística y bohemia muy activa, además de mucho extranjero paseando por sus calles, es otro punto a favor para la labor que yo desarrollo.

 

Mi inspiración sale de algún lugar recóndito que desconozco. Hay veces que me paso un buen rato mirando al sombrero antes de empezar a pintarlo. En ocasiones es como si «él me pidiera cómo quiere ser pintado».